Edgar G. Ulmer es un nombre que merece ser conocidos por los aficionados al cine pese a que su carrera se desarrollaría principalmente dentro de la serie B. Ulmer aprendería el oficio como asistente de Murnau y de Fritz Lang; así trabajaría en el Golem, Los nibelungos, Metropolis y M el vampiro de Dusseldorf. Participaría plenamente, fundamentalmente como decorador, en el desarrollo del expresionismo alemán. Esas enseñanzas se notarían especialmente en The Black Cat para la Universal, donde juntaría a los dos grandes iconos del cine de Terror, Boris Karloff y Bela Lugossi en un film rodado enteramente en estudio. Y volvería a ser destacable en la película que justifica este artículo, pues difícilmente alguien distinto a Ulmer hubiera podido aprovechar mejor los decorados de Juana de Arco prestados para la ocasión ni recrear ese ambiente que rodea toda la película. Un lío de faldas le enimistó con Carl Laemmle, lo que le dejó sin trabajo en Hollywood durante 8 años, que dedicó a dirigir películas y documentales en Nueva York. Ya de vuelta a Hollywood no le quedó más remedio que trabajar dentro de la serie B donde su calidad le permitiría destacar dentro del género de cine negro de los 40´s en películas como Detour (1945), La extraña mujer (1946) y Ruthless ( 1948). A mediados de los 50´s regresaría a Europa, trabajando fundamentalmente en Italia.
lunes, 30 de julio de 2007
El hombre del planeta X. El director
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