martes, 25 de septiembre de 2007

Aquellos maravillosos años

De un viejo archivador acabo de rescatar una libreta de mis años universitarios (uff). Solo contenía una hoja escrita, con varios nombres y algunos títulos de libros u obras de música. No recordaba la libreta ni el por qué de la lista, pero me ha resultado bastante curioso (y misterioso :-D). No querría que dicha lista se perdiera así que la transcribo aquí
El único nombre que me era desconocido era el tal Isaac Barhavet, lo cual no resulta extraño porque no he encontrado referencia alguna en internet. ¿dónde me toparía con ese nombre?


jueves, 20 de septiembre de 2007

El ciclo de la momia azteca

Hace escasos días me recordaban en una conversación de Internet a este personaje, protagonista de un ciclo bastante apreciado entre los seguidores del fantástico kitsch. La referencia me llevó a intentar recordar cosas del género fantástico mexicano de los años 50 y 60 con el que me topé siguiendo la obra de Boris Karloff (actuaría en sus últimos años en algunas películas de este género local) Y aunque tenía una ligera idea del cine mexicano de luchadores enmascarados (El Santo y demás) me sorprendió encontrarme con una tan variada producción de películas que daban cabida no solo a luchadores, sino extraterrestres, vampiros, momias, robots, brujas, etc.

En la Revista Cinefagia anotaban la posible razón de esta suerte de cine B mexicano de los años 50 y 60, como respuesta al desplome que la industria cinematográfica mexicana sufrió ante el incremento de películas americanas producidas para intentar competir con la televisión, obligando a esta a sobrevivir en el bajo presupuesto.

De entre estas, existen varias películas que perviven no solo por el interés que el género todavía despierta en el aficionado sino por reunir, pese a la barata factura que las creo, unos aceptables niveles de calidad. Películas como Santo contra la Mujeres Vampiro o El Barón del Terror son claros exponentes de ello.

No ocurre así con la trilogía a la que nos queremos referir (fuera de esta trilogía el personaje perviviría en otras producciones como Las Luchadoras contra la momia azteca, segunda película de Las luchadoras que dirigiría René Cardona y a la cual me hacía referencia ACEGE hace escasos día y me dio pie a este texto y otras como Las momias de Guanajuato). El ciclo lo formarían:

La maldición de la momia azteca (fotogalería de la película )

Curiosas a más no poder. Si a la primera es probable que le sobrara una hora de su metraje de 90 minutos, la tercera, de 60 minutos, dedica los primeros 30 a resumir las dos primeras películas en forma de flashback y utilizando imágenes de aquellas. Vamos, que si solo se ha de ver una película, decántense por esta última y así disfrutarán de toda la trilogía además de disfrutar como enanos de ese robot "humano" :-))

Serían rodadas casi al unísono y estrenadas una detrás de otra. Como decíamos no será la calidad el aspecto más distintivo de este ciclo sino en su carácter psicotrónico y más por el aspecto de "rara avis" dentro del género y el candor de su realización y de su producción que por cualquier otro atributo más serio y propio de una crítica cinematográfica. Hombre, tampoco quiero decir que sean las peores películas que uno pueda encontrarse, pero las hay mejores, no nos engañemos. Se mantienen como películas de culto de un género autotóctono, el fantástico mejicano, del que saldría el hoy justamente reconocido Guillermo del Toro. Pese a todo, ahí están, resistiendo en el imagenio del fan (acérrimo, eso sí) pero con su pequeño altar y constante devoción. Con la mente muy abierta, un disfrute seguro :-)))

domingo, 16 de septiembre de 2007

Pasiones Disney

Eso deduzco al encontrarme la semana pasada en Eurodisney estos tatuajes en una chica delante de la cola con la que esperábamos para que Barbalalá se hiciera fotos con Mickey. ¡Todos somos frikis!




sábado, 8 de septiembre de 2007

Tarzán de los tebeos II . Los comics book

La primera edición en comic de Tarzán, de 1929, recopilaba las daylies de Harold Foster. Como era habitual en la Golden Age, y verdadero origen de los comic-books, el éxito de algunos daylies y sundays permitieron su recopilación en tebeo. Así, la United Features Sydicate editaría The Illustrated Tarzan, y también recogería parte de material sus antologías Tip Top Comics y Comics on Parade. Aquí podremos encontrar el arte de Harold Foster y de Hogarth (entre otros)



Posteriormente los derechos para comic book recaería en la editorial Dell, que seguiría abasteciéndose de las daylies y sundays de los periódicos hasta que en Four Color Comics # 134 (1947),

empezaría a editar material nuevo y exclusivo de Tarzán para el comic book. Poco después, en 1948, contaría con cabecera propia con la edición del Tarzán # 1. Es en esta colección donde se podrá disfrutar del arte de Manning con el personaje


En 1962 los derechos de Tarzán pasarían de Dell a Gold Key Comics,

que continuaría la numeración de aquella, que aprovecharía el éxito del personaje lanzando un spin-off, Korak Son of Tarzán.

Cierta laxitud de la empresa gestora de los derechos del personaje permitió que paralelamente, y a partir de 1964, la Charlton publicara comics del personajes bajo la cabecera Jungle Tales of Tarzán, aunque esta situación apenas duraría un año.


Gold Key perdería finalmente su licencia en 1972, pasando a manos de DC que continuaría, como ya hizo Gold Key, publicando la serie con la numeración original, empezando con Tarzan # 207 y poniendo al personaje en manos de Joe Kubert. Pese al más que prometedor inicio, la serie sería finalmente cancelada con el Tarzán # 258 (1977).


En Junio de 1977 Marvel, que se hizo con los derechos tras la cancelación de la serie por parte de DC, iniciaría con nueva numeración una nueva colección, Tarzán, Lord of the Jungle, cuyas primeros números contaría con guiones de Roy Thomas. Esta serie alcanzaría los 29 números. Después de esa cancelación, personaje apenas aparecería en un par de números en 1984.


Tras Marvel, la editorial Malibú publicaría un par de miniseries del personaje en 1992 y 1993

para que finalmente fuera Dark Horse quien se hiciera con los derechos en 1995 y lanzara nuevas series del personaje que llegarían hasta primeros años del SXXI.






Tarzán de los tebeos I . Autores

No creo que el personaje precise de presentación alguna.Todos le conocemos del cine, muchos de su orígen literario y algunos otros de sus versiones en el mundo del tebeo, fundamentalmente la tira de prensa, que son los que se tratarán de presentar aquí.
El personaje creado por Edgar Rice Burroughs se inició en el comic en lastiras dominicales de la prensa adscrita a la United Features (27/09/1931) y supuso el nacimiento de unos comics más serios, destinados a un público más adulto (junto con Bucks Rogers) y su aventura editorial es fácilmente catalogable en tres etapas marcadas por sus dibujantes.
EL TARZAN DE HAROLD FOSTER

Hal Foster se ocupó de las tiras dominicales de Tarzán desde su inicio el 27 de Septiembre de 1931 hasta el 2 de mayo de 1937, fecha en la queabandonaría el personajes para dedicarse a su propia creación EL PRINCIPEL VALIENTE. Había debutado en las tiras diarias el 7 de enero de 1929 en las que se había mantenido hasta mediados de marzo de 1929.
En su dibujo, sobre todo, en las tiras diarias (b/n) juega con las luces,las sombras, el difuminado. Se nota un toque experimental,pero losresultados son espectaculares. Sus dibujos están trabajados, estudiados consiguiendo colosales ilustraciones de civilizaciones y edificaciones. Y todo ello pese a su descontento con lo guiones que le tocaba dibujar (que a la larga le llevaría a crear su propia serie)
EL TARZAN DE BURNE HOGARTH

Sustituto de Hal Foster, se ocupó de Tarzán desde el 9 de Mayo de 1937 hasta el 20 de agosto de 1950 con un breve lapsus de tiempo entre 1945 y 1947(concretamente hasta el 25-9-45 y retomado el 10-7-47). Una gran elección porque no era fácil la tarea de sustituir a Foster. Hogarth
demostró una gran capacidad al iniciarse con un estilo similar al de Foster de tal forma que casi pasa desapercibido el cambio de dibujante, pero poco a poco se acaba imponiendo su preciso y detallado estilo.Memorables su ambientes, cargados de detalles cuidados al máximo. También se notaría una evolución en el dibujo del personaje de
Tarzán, que aumentaria su complexión. En el aspecto argumentístico se mantienen las mismas directrices imperante durante los años de Foster.
También se encargaría de las tiras diarias entre septiembre del 47 y enero del 48
EL TARZAN DE RUSS MANNING.

Manning ya se había encargado de adaptar a los tebeos a otros personajes de Burroughs y conocía y admiraba el personaje de Tarzán de enero de 1978 y destacará su fidelidad a las historias de Burroughs (había trabajado con el personaje en su versión comic-book) y eso se notará en su trabajo. Se encargará de las tiras dominicales desde el 14 de Enero de 1968 hasta el 29
En su trabajo se nota una brusca rotura con los estilos anteriores. Su Tarzán abandona el paisaje colonialista (por otra parte totalmente desfasado a esas alturas del siglo) para centrarse en historias en mundos y personajes fántásticos rompiendo la, por otro lado, versión holliwoodiense del personaje (“yo, Tarzán ; tú, chita). (1)
Pero elegir otros caminos estéticos diferentes a los asumidos por los
autores anteriores no resta calidad alguna a su obra. Para muchos, el
Tarzán de Manning es el mejor Tarzán de tebeos que ha habido, de la misma forma que Foster y Hogard tienen sus defensores, pero hay unanimidad en reconocer la indudable calidad artística que atesora este personaje en sus tiras de prensa.
Manning, al igual que sus antedecesores, también se encargaría una temporada de las tiras diarias; así las dibujaría entre el 11 de diciembre de 1967 y el 19 de julio de 1972.
EL TARZAN DE JOE KUBERT

Para acabar, una breve mención del personaje en comic-book. En abril de 1972, los derechos del personajes recalan en DC quien continúa su edición a partir del 207 (llegarían hasta el 258) con un espectacular Joe Kubert hasta el num. 249 para posteriormente ser sustituído por José Luis García Sánchez.
Joe Kubert respetó el estilo original del personaje y entre sus viñetas no es difícil encontrarse claros homenajes al trabajo anterior de Harold
Foster. La espectacularidad de Joe Kubert bien merece una mención en el Olimpo de dibujantes del Hombre Mono.
En difícil decantarse por alguno de los dibujantes citados. Personalmente me inclino por Hogarth, preciosismo, detalle, ritmo, dinamismo, paisajes espectaculares donde se distingue hasta los tallos de la hierba … Aunque me gustaría poder echar un vistazo más completo al espectacular dibujo de Joe Kubert

LIBROS, LIBROS, LIBROS

Los dos últimos libros que he leído:


El libro que acabo de empezar:



miércoles, 5 de septiembre de 2007

Freddy Lombard-1. Y. Chaland Obra Completa

Colección Integral

Y. Chaland

Obra Completa

“Freddy Lombard – 1”

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Poco que añadir a los múltiples comentarios que sobre esta obra se pueden encontrar en internet. Un gran dibujo, línea clara, de grueso trazo, con el que Chaland supo experimentar y alzarse sobre el resto de artistas dentro de este estilo de dibujo. Esa capacidad de extenderse, con éxito, más allá de los límites de la línea clara, ya lo apuntó por aquí ACEGE, es posiblemente la principal razón para la gran consideración que a los aficionados merece el trabajo de Chaland.

En cuanto al guión, se nota su falta de experiencia en esta lides en la simpleza de (entre comillas) de sus historias contenidas en este tomo 1, “El testamento de Godofredo e Bouillon” y “El Cementerio de los Elefantes” (el volumen recoge una tercera historia, “El Cometa de Cartago”, de guión compartido con Yann)

De sus dos historias (o tres, porque la segunda tiene un extraño prólogo que no acredita, historia independiente por sí misma), me quedo con la segunda. Artísticamente ambas se alzan al mismo nivel, si bien destaco, muy personalmente, con unas cuentas viñetas coloniales incluídas en El Cementerio . . . así como, también en esta, con las escenas desarrolladas en una especie de club de jazz en medio de Africa (bueno, se incluyen en esa especie de prólogo mencionado anteriormente)

Pero otra cosa distinta es “El Cometa de Cartago”. Se nota la mano de Yann, más experimentado, y que consigue armar una historia más redonda, a mucha distancia de las más insípidas historias anteriores. Esta avanza como en capas y se aprovecha mucho mejor la personalidad de Lambard (o empieza a fijarse). Pese a todo ello, creo que falla un poco ya que no termina de redondear el ambiente cerrado y claustrofóbico que requiere la historia. Existe la intención, pero no termina de conseguirlo.

lunes, 3 de septiembre de 2007

Palabras, palabras, palabras

proselitismo.

1. m. Celo de ganar prosélitos.

prosélito.

(Del lat. tardío prosely̆tus, y este del gr. προσήλιτος).

1. m. Persona incorporada a una religión.

2. m. Partidario que se gana para una facción, parcialidad o doctrina.

domingo, 2 de septiembre de 2007

El fiscal traza un círculo. Erle Stanley Gardner

El fiscal traza un círculo

Erle Stanley Gardner

Biblioteca Oro de Misterio (ABC)

Hacía mucho tiempo que no devoraba un libro como lo he hecho con este. Cierto que ha contribuído notablemente el encontrarme de vacaciones y con mucho tiempo libro, pero lo cierto es que me lo he leído en un día y ello solo pudo ser causado porque la historia, los personajes y la intriga me atraparon desde el primer momento.

Recuerdo que en cierta ocasión, durante mi etapa universitaria, un libro me atrapó de tal manera que no pude dejar de leerlo hasta acabarlo completamente. Fueron seis horas ininterrumpidas de lectura; se trataba de un bestseller de esos del momento, curiosamente también de género policíaco, del que ahora mismo lo único que recuerdo es que el protagonista, un inspector (o ex_inspector) de la policía de Nueva York tenía una pierna ortopédica .

Obviamente no quiere decir que otros libros no me hayan atrapado, sí lo han hecho. Así recuerdo que cuando leía por primera vez el Señor de los Anillos era incapaz, cuando dejaba la lectura, de pensar en otra cosa que no fuera la Tierra Media. Y cuando acabé el libro lo empecé otra vez de nuevo. O La piel del tambor, de Arturo Pérez Reverte, que me enganchó de tal manera que estaba deseando llegar a casa del trabajo para continuar leyéndolo.

Decía antes que influye el disponer de bastante tiempo, pero el libro también tiene que aportar interés en dosis suficiente como para que la lectura te embriague de esa manera. Lo primero que destacaría son los personajes, arquetípicos pero no tanto (es que es difícil de explicar), con ese fiscal y esa gran camadería con el sheriff del condado, esa guapa (presumiblemente guapa) periodista y todos esos secundarios que ayudan a crear una historia de intriga como la que aquí nos cuentan.

Porque además, el ritmo de la novela no decae en ningún momento, y ves que todo avanza pero nada parece estar cerca del final porque esperas que el final de la novela y la resolución del caso lleguen al mismo tiempo, pero hay momentos en que te hace dudar. ¡Que esto se acaba y no se vislumbra luz! No, todos tranquilos que el fiscal Doug sigue trabajando. Tan solo hubo una pequeña parte que se me hizo un poco pesada. Bueno, en realidad habría de decir que narrativamente la novela se resintió un poco y es la parte de la historia que se desarrolla en el Tribunal de Justicia, ante el juez, pero afortunadamente es breve. Pero sí que llegué a temer que a partir de ese momento la novela se desarrollara como una historia de juzgados y que la conclusión y resolución del caso se hiciera ante los tribunales, lo cual, en mi caso, hubiese supuesto una gran desilusión porque no me atrae nada las noveles de juicios y tribunales (si existen con esta calificación, que no lo sé). De hecho, en ese pequeño momento de pánico al temer un cambio drástico en el desarrollo de la novela pesó la imagen que tengo del autor y sus más famosas novelas, pero no por la versión escrita sino televisada

Afortunadamente no fue así y se convirtió simplemente en un capítulo más de la novela y esta siguió campando al buen nivel de los capítulos precedentes, no decepcionandome en ningún momento.

También destacaría lo hábilmente que el autor da un tono político a la historia, no en formato pronunciación política sino situando la historia en un contexto representado por dos periódicos antagónicos en la comarca, con su claras preferencias y su marcada opción política como fin de sus editoriales y noticias, aunque este caso esas opciones políticas sean de andar por casa y referida a elecciones particulares del fiscal y del sheriff de la comarca.

En definitiva, una muy buena opción de lectura para las vacaciones. Lo suficientemente entretenida como para que ayude a pasar un buen rato y combatir el aburrimiento y lo suficientemente interesante como para no considerarlo una lectura más, “sin chicha ni limoná”. Ahora, eso sí, la edición pese a que respeta la edición original de la edición Molino, con los mismos anuncios, las mismas ilustraciones, etc, debiera haber corregido algunos errores de montaje, que repite algunos párrafos o se salta algunos otros. En fin, un mal menor, pero que merece ser comentado.