miércoles, 14 de noviembre de 2007

La hora estelar de los Asesinos, de Pavel Kohout



LA HORA ESTELAR DE LOS ASESINOS

Pavel Kohout

Editorial Alianza

En los últimos meses de la Praga ocupada por los nazis, previos a la entrada de los rusos, un asesino en serie mantiene en jaque tanto a la policía criminal checa como a un criminalista alemán adscrito a la GESTAPO. Así indicado, queda claro que estamos ante una novela de género negro pero originalmente ambientada durante la segunda guerra mundial. Pero no es así, es mucho más. O a la mejor es más preciso decir que no es así ni mucho menos. Intentemos explicarnos.

A simple vista, la novela se vertebra sobre las andanzas de este asesino y las investigaciones de la policía checa y el oficial alemán. Pero sin embargo, a medida que avanzamos en el libro descubrimos que casi es la excusa del autor para desarrollar, presentar y analizar las pasiones humanas, tanto la psique del asesino como la evolución de los sentimientos del policía alemán como el del policía checo y no necesariamente relacionado con el caso investigado sino sobretodo sus posturas ante la vida, ante la situación de ocupación que vive la ciudad de Praga y la guerra en la que están inmersos, todo desde la experiencia que cada uno atesora. Pero también viene a ser una crónica de esos últimos meses de ocupación nazi en Praga y la llegada de las tropas rusas e instauración del comunismo. Nunca perdiendo la senda de la investigación criminal, poco a poco la novela deja de ser una novela de género y ahí es donde puede producir cierta decepción. Si esta novela se lee pensando en el género detectivesco es posible que no cumpla las expectativas. Sin embargo, teniendo en cuenta todo lo demás estamos ante una gran novela, un gran fresco que presenta el cambio de tercio que vivió la ciudad de Praga al final de la segunda guerra mundial y, muy destacable, sin caer en el fácil maniqueísmo (y si no, podrán comprobarlo con ese epílogo que, después de toda la novela, con ese final, viene a ser una especie de puñetazo en el estómago) Pero tampoco es solo una mezcla de novela negra y novela histórica, es algo más que eso basado en cómo analiza el alma humana, tanto la vileza del asesino como la de los dos policías perseguidores, ambos enfrentados a una misma experiencia, pasada en el caso de uno y presente en el caso del otro, que los une pero que afrontaron de distinta manera.

Personalmente me impresionó, cuando acabé la novela, el gran cambio que el autor había sido capaz de transmitirme desde el ambiente en el que se inicia la novela al ambiente en el que este acaba. Solo al final fui consciente de cómo el autor me había ido presentando esa cambio. Sin necesitar párrafos descriptivos, sin perderse ni abandonar el ritmo (trepidante por otro lado durante casi toda la novela) únicamente contándonos las diversas actividades y acciones, y cómo estas van cambiando a medida que cambia la situación de la ciudad, a la que se ven acometidos los protagonistas, el autor va avanzando en el gradual cambio que experimenta la ciudad de Praga como escenario de la novela. En ese momento te das cuenta de por qué en muchos sitios se dice que la verdadera protagonista de la novela es la ciudad de Praga.

Recalco nuevamente la posibilidad de que quien busca una novela de género al uso pueda sentirse decepcionado pero ello no quita estar ante una gran novela.



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